La democracia en América

Resumen

Doscientos once años después de su independencia, la república democrática subsiste en los Estados Unidos ¿Qué hizo posible que siglos después, atravesando por crisis económicas internacionales, dos guerras mundiales, presiones internas y externas, esta nación camine aún hacia latitudes de impredecible -por enorme- desarrollo? Alexis de Tocqueville en la “La Democracia en América" apunta algunos de los elementos que considera fueron los que hicieron posible el florecimiento de este pueblo.

Los colonos encontraron a su llegada al nuevo mundo: un continente vacío. Las tribus indígenas no estaban asentadas en territorios específicos y su población era ínfima en comparación al terreno que disfrutaban. Las condiciones estaban dadas. El colono, amante del orden, ilustrado, profundamente religioso, arraigado a sus costumbres y sobre todo acostumbrado a la libertad, ejerció indudablemente una gran influencia en el destino de la nueva patria. Las costumbres, -que constituyen el único poder resistente y duradero de un pueblo-, y la religión, moralista, directora de las costumbres, y rectora del quehacer humano, fueron conformando un sistema de leyes rígido, estricto e inquebrantable.

Fueron agricultores largo tiempo antes de ser manufactureros y comerciantes. La situación particular en que la Providencia los situó, sumada al buen sentido, al genio, al cálculo y al estudio, fue configurando la sociedad y su estado social, causa primera de la mayoría de las leyes, costumbres e ideas que rigen la conducta de esta nación.