El universo político contemporáneo y latinoamérica: de la guerra fría a la perestroika

Resumen

Con Rafael Ángel Calderón, Hernán Castro, Bernd H. Niehaus, Rolando Laclé, y tantos otros amigos que cordialmente me han invitado a ser partícipe de este dialogo en la Asociación Pro-Defensa de la Libertad y la Democracia, hemos coincidido en varios Foros en las más diversas latitudes del mundo. En Fidji, la lejana isla del Archipiélago distante del Pacífico Sur, con asistencia de líderes de las grandes potencias del área: Japón, Australia, Nueva Zelanda, para citar algunos y otros de no más de treinta o quince mil habitantes, como Vaniatu, Samoa. En Berlín, esa ciudad de encuentro y distancia entre el occidente capitalista y el este marxista. En Estados Unidos, en momentos estelares de la democracia de esa admirable nación. Como también en mi Patria, donde hace pocos meses participaron, rodeados del aprecio y respeto de mis conciudadanos, en interesante y original simposio sobre las repercusiones en Latinoamérica de la perestroika soviética.

En esas reuniones, hemos confirmado que las ideas no tienen nacionalidad, y que nuestros pueblos tienen que colocarse a tono con una humanidad que ha dejado, en los cofres donde se guardan las cosas del pasado, el dogmatismo y con pragmático realismo está afrontando el análisis de los problemas y las propuestas de alternativas para cumplir el transito del milenio que ya está a la vuelta de la esquina.

Por ello, quienes tenemos alguna responsabilidad de dirigencia en nuestros respectivos países, debemos entrar sin timideces a establecer el intercambio de conceptos políticos, pues, como bien lo enseña la experiencia, y Europa es ejemplo, la integración de los pueblos, sin el personal contacto en los diferentes niveles de los estados, no pasa de ser una abstracción geográfica sin savia vivificante.