Justificación moral del derecho a la propiedad privada

Resumen

La mejor manera de apreciar las ventajas del derecho de propiedad privada es considerando los inconvenientes y/o desventajas de las sociedades donde éstos no existen. En ellas el individuo se ve frecuentemente «desconectado" de las consecuencias de sus acciones, sean éstas positivas o negativas. Por lo tanto, las labores que sólo arrojen resultados a largo plazo, no se realizarán. Durante el siglo XVII, Thomas Hobbes, describió un «estado natural„ muy parecido al de una sociedad donde no se ha establecido el derecho de propiedad. «Bajo tales condiciones», escribió en 1651 en Leviathan, no hay lugar para la Industria, porque sus frutos serán inciertos; consecuentemente no se cultivará la Tierra, no existirá la Navegación, ni el uso de productos que deban ser importados a través del mar; no habrá construcción; ni se llevará cuenta del Tiempo, no existirán las Artes; ni las Letras, ni la Sociedad; y lo que es peor aún, habrá un temor constante…

(En ese mismo párrafo Hobbes escribió que la vida del hombre bajo esas condiciones sería «solitaria, pobre, sucia, violenta y corta»).

Durante la ratificación de la Constitución de los Estados Unidos, John Marshall, el cuarto Juez Mayor de la Corte Suprema, expresó una opinión parecida a la de Hobbes. «La industria y la economía" forman parte integral de la felicidad, dijo en 1788, pero les Artículos de Confederación (previos a la Constitución), quitaron «el incentivo a la industria al poner en tela de juicio y no proteger la propiedad»