Alternativas para mejorar la circulación urbana

Resumen

Locura vial, caos urbano, colapso vial, etc., estas frases se emplean casi diariamente en nuestra prensa nacional para describir el estado que presenta la circulación vial en el Área Metropolitana de San José (AMSJO). No son frases trilladas al amparo de una situación excepcional sino que, por el contrario, se refieren a un problema de fondo que las administraciones públicas han evitado tratar con la seriedad del caso.

Cada frase es un reclamo colectivo por la inercia de nuestros gobiernos y de nuestra sociedad técnica, incapaces de encontrar soluciones efectivas para enfrentar el estado de crisis a que se ha llegado en nuestras vías, en las que la circulación vial está alcanzando niveles parecidos a los de una "epidemia social".

Si bien es cierto que el AMSJO es una metrópoli de un país en vías de desarrollo, esto no justifica el abandono y la falta de políticas claras de los sucesivos gobiernos para su recuperación y modernización. Hace falta un plan nacional de largo plazo que defina el rumbo del país en cuanto a nuevas infraestructuras viales y políticas de seguridad de la circulación.

Y es que el país no sólo no cuenta con infraestructura vial apropiada, sino que tampoco dispone de una legislación de tránsito adecuada, salvo una ley más "para ir tirando mientras tanto" que para cumplir con su verdadero propósito.